Nuestra vivienda es el lugar donde deberíamos sentirnos más seguros. No hablamos solo de alarmas o detectores de presencia. Entrar en nuestra casa y ver que la han destrozado o que ha habido una fuga de agua es una sensación desagradable, y más si no estamos cubiertos ante estos hechos.
En nuestro hogar se pueden dar diferentes problemas o siniestros que pueden suponer un gran desembolso económico. Sin embargo, existe una manera de estar protegidos frente a este tipo de siniestros, el seguro del hogar.
Obligatoriedad del seguro de hogar
Poseer un seguro para tu vivienda solo es obligatorio si está hipotecada. Si, por ejemplo, compras tu vivienda al contado o con un préstamo personal, no será obligatorio poseer este tipo de seguros.
Esta obligatoriedad del seguro de hogar está regulada por la Ley de Regulación del Mercado Hipotecario.En dicha Ley se exige que los bienes hipotecados estén asegurados contra daños por el valor por el que se tasen. Además el seguro debe adecuarse a la naturaleza del bien; es decir, si es una vivienda, deberemos poseer un seguro para la vivienda. El importe por el que se asegure deberá ser el mismo que aquel por el que se valore por primera vez la vivienda.
Por todo ello, mientras dure la hipoteca, nuestra vivienda deberá estar asegurada, al menos, contra los daños que se produzcan a consecuencia de un incendio, siendo el beneficiario el banco con el que hayamos contratado la vivienda.
Como ves, el seguro solo es obligatorio en un caso, pero es algo muy recomendable, más allá de para estar cubierto económicamente, para evitar problemas legales con otros vecinos, como puede pasarnos si creamos goteras a otras viviendas debido a una fuga de agua, antes de darnos cuenta y cortar el agua.
Valoración correcta de contenido y continente
Elegir un seguro de hogar puede ser algo imposible, pero una cosa a tener en cuenta es valorar de manera correcta nuestra vivienda y los bienes que tengamos en ella.
En este sentido, los seguros hacen una diferencia entre contenido y continente. El continente sería el cuerpo de la vivienda, así como las instalaciones fijas. El contenido serían los bienes incluidos dentro de la vivienda.
A la hora de saber cómo elegir un seguro de hogar debes tener en cuenta el término infraseguro. Esto se da si el valor del capital asegurado es inferior al valor de reposición a nuevo del objeto asegurado.
En ocasiones infravaloramos nuestra vivienda para pagar menos por el seguro y, cuando ocurre algún siniestro, no estamos cubiertos, por lo que, en realidad, habremos perdido dinero.
Coberturas básicas y complementarias
Las coberturas incluidas dependerán del tipo de seguro que contratemos, es decir, las podemos elegir nosotros.
Más allá de estas coberturas básicas existen otras que podemos elegir para complementar nuestro seguro, algo que hay que tener en cuenta a la hora de saber cómo elegir un seguro de hogar.
Una de las coberturas más básicas que existen es la de responsabilidad civil. Esta cobertura nos cubre los daños que tanto el asegurado como la vivienda puedan provocar, de manera accidental, a terceros.